Review | Clemente en Chocolate: Una Noche de pop, romanticismo y emoción

 

Escrito por Dominic Ortiz

Mientras algunos pedían sus tragos favoritos y se sentaban en sus mesas a esperar el show, la gente poco a poco, y de forma muy entusiasta, llegaba al Club Chocolate, en donde Clemente, la nueva promesa del pop romántico chileno, se preparaba tras bambalinas para dar uno de sus mejores conciertos.

Después de una hora de espera, y mientras probaban por última vez los instrumentos, las luces se apagaron causando la euforia de los presentes que se intensificó aún más cuando Clemente pisó el escenario. Lleno de alegría y saltando por todo el escenario, el intérprete osciló entre su antiguo álbum “Vaivén”, el cual lo hizo conocido a nivel nacional e internacional, y su nuevo álbum titulado “Las cartas pendientes”, el cual ya todos sus fanáticos coreaban con entusiasmo con canciones como “En 3 minutos” y “Besos guardados”.

A diferencia de recintos grandes como el Movistar Arena, el Club Chocolate se caracteriza por ser un lugar pequeño en donde interactuar con la gente es mucho más fácil y eso Clemente lo supo disfrutar: con bromas a sus seguidores, sacándose fotos con celulares ajenos e incluso contando anécdotas de las primeras veces que se cruzó con sus primeros seguidores. El show continuó con la misma energía que comenzó y con un público tan comprometido, que lo dio todo hasta el final, saltando y gritando como se debe.

Pero como un buen concierto no sería nada sin sorpresas, Shirel, cantante y compositora peruana-chilena se subió al escenario a cantar el tema “El enemigo”, en donde se mezcló el entusiasmo de Clemente con la voz suave y distintiva de la intérprete de 'Faroles', quien se robó el escenario por un par de minutos, para después devolverle la atención a Clemente, quien no daba más de la emoción y por momentos parecía que esta le ganaba y las lágrimas salían de sus ojos. Y es que ver a tantas personas gritar tus canciones por casi una hora y media, es el sueño cumplido de todo cantante.

Ya para las 22:45 y para ir concluyendo el concierto, Clemente cantó sus últimos temas, entre ellos “Batallón”, con la cual le dio tiempo hasta para hacerles una broma a los presentes, cortando la luz y dejando de cantar por unos segundos. Como conclusión, fue un show dinámico y divertido, que te hacía pasar por emociones entre la alegría y la melancolía sin saber si creer de nuevo en el amor o irte con el corazón partido.